ignominioso o ignominiozo

    El vocablo ignominioso/ ignominiozo ¿se tiene que escribir con ‘g’ o con la letra ‘j’?¿Sientes indecisión entre escribir ignominioso o bien ignominiozo? No te agobies, te vamos a echar un cable. Son muchas las personas que experimentan la misma duda que tú, y eso es debido a que en español tanto ignominioso como ignominiozo son muy similares en su pronunciación. Debido a esta similitud a la hora de pronunciarse, es habitual no estar seguros de cuál es la manera adecuada de escribir este término, si ignominiozo o de la siguiente forma ignominioso. No vamos a malgastar más tiempo en sacarte de dudas, entre ignominiozo y ignominioso, el modo correcto de escribir esta palabra es: ignominioso. Amén de obsequiarte con esta respuesta que solicitabas, nos agradará brindarte otros aportes para las situaciones en que te surjan dudas con respecto a en qué ocasiones se debe escribir ‘g’ y en qué otras se debe escribir ‘j’. De ese modo cada vez experimentarás menos titubeo del tipo ‘¿El modo correcto será escribir ignominioso o acaso es ignominiozo?’

    ignominioso

    ignominiozo

    Sugerencia para escribir siempre bien ignominioso

    Nunca deberías dudar entre ignominioso y el término ignominiozo cuando quieras escribir, ya que tan solo nos encontramos con una manera viable de escribir esta palabra con corrección, y es: ignominioso. El término ignominiozo simplemente no corresponde a ninguna palabra que se encuentre en el diccionario de la RAE.

    Con el fin de que te sea más fácil recordar la manera en que se debe escribir ignominioso, la definición del diccionario:

  1. Que es ocasión o causa de ignominia.[ 1] Ejemplo:
  2. «Había vivido una existencia ignominiosa que no conocía ni temía a Dios.» Defoe, Daniel (2015 [1719]). Robinson Crusoe. Mestas, 144.
  3. Que ha sido afrentado públicamente. Sinónimos: vil , infame , innoble , deshonroso , afrentoso , degradante , injurioso . Antónimos: honorable , honroso , noble , respetable . Ejemplo:
  4. «No hay ningún principio moral valedero que pueda estigmatizar su uso en una situación como la que sufre Chile desde hace quince años. O el país acepta la esclavitud indefinida o se levanta para terminar con el despotismo ignominioso» Teitelboim, Volodia (1988). En el país prohibido. Sin el permiso de Pinochet. Barcelona: Plaza y Janés, 243.