incunable o hincunable

    El término incunable/ hincunable ¿se tiene que escribir con ‘g’ o con la letra ‘j’?¿Te sientes indeciso a la hora de escribir entre escribir incunable o a lo mejor escribir la palabra hincunable? Tranquilo, aquí estamos para ayudarte. Nos encontramos ante un gran número de personas que tienen una inseguridad similar, y eso es porque en castellano tanto incunable como hincunable suenan del mismo modo. Por motivo de esta similitud en la pronunciación, es usual sentir dudas en cuanto a cuál es la manera adecuada de escribir este término, hacerlo escribiendo hincunable o lo que debes hacer es escribir incunable. Tranquilo, que no te haremos desperdiciar más tiempo dando rodeos, entre hincunable y incunable, la manera adecuada de escribir este término es: incunable. A parte de brindarte esta respuesta que buscabas, nos gustaría enseñarte algunas aportaciones más en los momentos en que te surjan dudas sobre en qué ocasiones se debe escribir ‘g’ y en qué casos se escribe ‘j’. De esta manera cada vez tendrás menos titubeo del tipo ‘¿Debería escribir incunable o tal vez hincunable?’

    incunable

    hincunable

    Consejo para escribir bien incunable

    Nunca jamás debes dudar entre incunable y la palabra hincunable cuando debas escribir, ya que únicamente hay una forma viable de escribir este término con corrección, y es: incunable. El término hincunable sencillamente no se encuentra en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.

    Con el propósito de que recuerdes mejor la manera en que deberías escribir incunable, la definición del diccionario:

  1. Dicho de un libro, impreso entre la invención de la imprenta en 1450 y el comienzo del siglo XVI Uso: se emplea también como sustantivo Relacionado: códice Ejemplos:
  2. "Mas esta opinion no es corriente, y los barceloneses pretenden que allí se imprimiera la primera obra que se dió á luz en España por aquel nuevo método. y en especial para la renovacion de los libros del oficio divino, muy deteriorados por el uso contínuo y preciso, y por la dificultad en renovarlos. Las iglesias de Barcelona, Valencia, Vich, Zaragoza, Toledo y Salamanca se apresuraron á utilizar tan precioso invento, y en casi todas las obras incunables, ó de aquel tiempo, se echa de ver la mano de varios eclesiásticos, ó como escritores, ó costeando las ediciones." de la Fuente, Vicente (1874) Historia eclesiástica de España. Madrid: Compañía de Impresores y libreros del reino, t. V, p. 94
  3. "Este loco (y perdóneme la franqueza) no busca libros, sino ediciones; ejemplares raros por su escasez y por su fecha. Un incunable ¡qué felicidad!" de Pereda, José María (1880) Manías. Madrid: M. Tello, p. 356
  4. "Este tratado de higiene es el más conocido y famoso de Arnaldo, y hay de él innumerables ediciones sueltas: diez enumera Nicolás Antonio, a contar desde la de Pisa, 1484. Pero nuestro La Serna Santander describe otras dos incunables sin fecha ni lugar. La primera parece ser de Lovaina typis Joannis de Vestphalia; la otra se dice enmendada por los doctores de Montpellier, y entrambas fueron impresas hacia 1480, según opina La Serna" Menéndez Pelayo, Marcelino (1948 [1881]) Historia de los heterodoxos españoles. Madrid: CSIC, t. II, p. 260